Vender y vivir
Cuando llevas más de 35 años vendiendo, adquieres algo que nadie te puede dar, experiencia y te permite la reflexión empírica sobre todo lo pasado y aventurar lo que vendrá.
No es lo mismo, hacer las mismas cosas 35 años que conseguir que todo ese tiempo sume, multiplique tus conocimientos y actitud.
Ayer escuchaba en la radio a un psicólogo de Granada que acaba de publicar un libro llamado, y pido disculpas; “Hasta los cojones del pensamiento positivo” el autor se llama Buenaventura del Charco. Decía que a su consulta esta llegando personas con patologías depresivas o de ansiedad al que añaden un profundo sentimiento de culpa ya que hoy se les presiona en la sociedad a ser felices, positivos, listos, jóvenes y guapos. Buenaventura reivindica el derecho de todos a estar mal, a sentir dolor y a reponerse y sobre todo no albergar ningún sentimiento de culpa.
Ser feliz vendiendo
Otra cosa es que en la vida y en la venta, que van necesariamente juntas. Solo hay una vida. Necesites de una actitud positiva que te ayudará a llevar mejor lo que venga, que está garantizado que no todo será un paseo. Martin Seliger te puede ayudar a entender a que me refiero y te recordará que de esta vida, solo nos llevamos relaciones y momentos y muchos de esos momentos que valen la pena, ocurren con clientes, compañeros y prospectos, benditos prospectos.
Ya tenemos algo, una mentalidad positiva y consciente que nos ayude. Es imposible ser un buen vendedor sin tener valores, no se puede ser un vendedor sin ser buena persona. Serás un estafador emocional y básicamente un pedazo de mierda. Aquí voy a dejar las palabras malsonantes ya que un vendedor (en español esta palabra incluye ambos géneros), una pena tener que recordarlo, necesita de cierta elegancia en todo lo que hace, en todo lo que supone una relación con los demás.
En este mundo comercial encontrarás “guruses” que te ofrecerán ser rico en un año, sin trabajar o que simplemente siendo positivo atraerás la abundancia (huyo de los que usan esta palabra). Tras la pandemia ha surgido como setas, ojo la gente se tiene que ganar la vida, pero es fundamentan que sea sin engañar a nadie. La venta se puede aprender, la formación es muy importante y tendrás que elegir a algún profesional para que te acompañe ese viaje. Si miras con atención distinguirás a ese profesional de esos payasos (digna profesión como la de vendedor) que lo único que han vendido es humo y mentiras. Algunos vídeos de promoción son para mondarse.
Aprender a vender
Todo lo que hay que saber de ventas está en los libros, Covey, Ziglar, Tracy, Dixon, Barajas, Piqueras, Flores, Gadea, Torremocha, Machín y muchos más tienen buenos libros en esta disciplina tan compleja y generosa. Hasta yo tengo publicado un libro de ventas. No necesitas mucho más que ese conocimiento para dominar los principios comerciales.
Tendrás que añadir a esa formación la experiencia. Nadie te va a hacer sentir el miedo o la incertidumbre de hacer una puerta fría o la responsabilidad que tienes ante tus clientes, esto solo te lo dará la experiencia. Una buena formación en ventas, las hay hasta universitarias, como en la UAM te ayudará a entenderlo mucho mejor y te aportará herramientas pero la experiencia, amigo, te la dará la experiencia.
Al final crearás tu propio proceso de ventas, tu propia metodología, que irás mejorando cada día que te relaciones con un cliente.
Tu responsabilidad en ventas
La venta es un proceso cuya práctica te hace crecer como persona y como profesional, es un darte a los demás y hacer que sus vidas y sus trabajos sean mejores. Vender es ayudar y los buenos vendedores mejoran el mundo, iluminan la habitación en la que están y hacen mejores a las personas con las que se relacionan. Es una gran responsabilidad que tienes que estar dispuesto a asumir.
Si te apetece seguir avanzando, aquí tienes un pequeño manual de ventas basado en la experiencia y los valores y en aprender de los errores, que seguro te ayuda.
Un abrazo