¿Te molesta que no te contesten? En cualquier organización, la fluidez de la comunicación entre sus miembros y hacia sus clientes es fundamental. El feedback actúa como un puente que conecta las expectativas con la realidad, asegurando que todos los involucrados estén alineados con los objetivos y el progreso de las tareas o proyectos. Cuando se asigna una tarea, el encargado de realizarla tiene la responsabilidad no solo de completarla sino también de informar su avance y conclusión. La omisión de este paso esencial puede generar una cadena de seguimientos innecesarios, como llamadas, visitas o correos electrónicos, que consumen tiempo valioso tanto para el encargado de la tarea como para quien la ha asignado.
La pérdida de tiempo por la falta de comunicación
La ausencia de feedback oportuno y adecuado puede resultar en una pérdida significativa de tiempo, un recurso escaso en el mundo empresarial. Cuando no se comunica el estado de una tarea, el solicitante, en busca de tranquilidad y certeza de que el trabajo se está realizando o se ha completado, se ve obligado a iniciar una serie de interacciones adicionales. Esta redundancia no solo interrumpe el flujo de trabajo del solicitante sino también el del encargado de la tarea, quien debe detenerse a responder estas consultas en lugar de avanzar en sus actividades. Esta dinámica se traduce en una disminución de la productividad y, en última instancia, en un impacto negativo en los resultados de la organización.
Feedback en el contexto de ventas y el uso de CRM
En el ámbito de las ventas, el feedback es aún más crítico, dado que las interacciones con los clientes y prospectos deben ser gestionadas con precisión y profesionalidad. Los sistemas de gestión de relaciones con clientes (CRM) han sido diseñados para automatizar y optimizar estas interacciones, proporcionando una plataforma centralizada para el seguimiento de las comunicaciones, las ventas y las actividades de servicio al cliente. Sin embargo, el valor real de un CRM reside en la calidad y la consistencia de la información que tiene.
Los equipos comerciales deben asegurarse de registrar de manera oportuna y precisa todas las interacciones, ventas y feedback de los clientes en el sistema. Una entrada incompleta o errónea no solo afecta la capacidad del equipo para actuar sobre esa información sino que también puede llevar a decisiones basadas en datos incorrectos, lo cual es perjudicial para la estrategia comercial y la relación con el cliente. Conseguir esta disciplina distingue a unas empresas de otras.
En los cursos de ventas debemos insistir en la importancia de este aspecto. El CRM no es una herramienta de fiscalización y si de gestión y los comerciales que lo entendemos y trabajamos conseguimos mejor relación con los clientes y por lo tanto mejores resultados. El CRM integra toda la parte de relación digital con e-mailing integrado, landing pages y herramientas de lead generation, la mejor ayuda comercial. Unir marketing y ventas en una herramienta marca la diferencia.
La importancia de responder a comunicaciones
Más allá de la gestión de tareas y la interacción con clientes, la cultura de respuesta rápida a emails y otras formas de comunicación es esencial en el entorno laboral actual. Cada correo electrónico, pregunta, propuesta o comentario que se recibe merece ser reconocido y respondido, incluso si es solo para informar que se necesitará más tiempo para proporcionar una respuesta detallada. Esta práctica no solo demuestra profesionalismo y respeto por el remitente sino que también ayuda a mantener un flujo de comunicación eficiente y efectivo, evitando malentendidos y la acumulación de tareas pendientes.
Un “gracias” y un breve comentario hace más eficiente y fluida la comunicación.
La implementación de una cultura organizacional que valore y promueva el feedback oportuno y la comunicación efectiva es fundamental para la eficiencia y el éxito a largo plazo. Al reconocer la importancia de informar sobre el progreso y la conclusión de las tareas, así como de responder adecuadamente a las comunicaciones recibidas, las organizaciones pueden mejorar significativamente su productividad y sus relaciones tanto internas como con los clientes. En última instancia, estas prácticas conducen a una mejor gestión del tiempo, a la reducción de redundancias y a una mayor satisfacción general.
Personalmente, hasta que no tengo la confirmación de que una tarea asignada al equipo está realizada o la respuesta de un cliente, sigo en estado de alerta y eso no me permite seguir avanzando con otros asuntos. Esta situación de bloqueo es la que generamos al no dar feedback. Poco cuesta enviar un Whatsapp…-“cliente avisado” “informe entregado, buen día””Hecho, gracias” Un correo o un comentario a tiempo es una gran opción que se olvida con frecuencia. Luego están las personas que no pueden darlo, por no terminar las tareas cuando dijeron, pero eso será motivo de otro post.
-“Artículo finalizado, gracias y un saludo”